Mapa emocional o una ruta hacia la creatividad.
Existen muchas formas de activar nuestra imaginación, pero a veces los escritores también nos encontramos con muros que bloquean nuestra inspiración.
Cuando esto ocurre, precisamos de herramientas que derrumben esa muralla y nos ayuden a encender nuestro entusiasmo.
Comparto contigo este mapa emocional, algunos de esos lugares mágicos que me han inspirado para crear la ambientación de mi primera novela. Por si te apetece descubrirlos, por si te animas a conocerlos, o por si despierto tu lado más aventurero.
Cuaderno de rutas, agosto de 2017.
Mi historia se va trasformando conforme avanzo en este viaje. En algunos destinos había visitado en el pasado. Pero cuando volví, los miré con otra perspectiva, los vi con otros ojos. Porque las cosas, las personas, los lugares, … cobran importancia según el cristal con el que los observe tu alma.
Los escritores distinguimos la realidad como si cada momento fuera especial.
Un #mapaemocional no precisa de grandes viajes para encender la llama de tu curiosidad. Solo se necesita de ganas de descubrir.
Esos lugares mágicos.
Las vacaciones. Hay que exprimir hasta el último momento.
Guardar sensaciones que luego permitan a tu imaginación regresar de nuevo hasta ese lugar. Sin duda, Galicia está lleno de paisajes que merecen tu atención.
Playa de Rodas, en las islas Cíes, me cautivó. Cuando estés allí, intenta retener cada sonido, cada olor. Cierra los ojos y deja que los sentidos se agudicen. Y aunque el agua esté congelada, ¡pégate un buen chapuzón! Te sentirás más vivo.
Puede que alguien te pida que lo acompañes a un sitio que no estaba marcado en tu mapa emocional. Un consejo, ¡no te niegues! Una ruta improvisada es buena para descubrir rincones maravillosos que no sabías ni que existían.
A mí me ocurrió con Estaca de Bares. Un destino espontáneo, que se convirtió en especial.
Volver a casa. Porque, aunque a veces escapes de ella con ansias de querer volar lejos, reconócelo, no hay ningún otro lugar donde seas capaz de sonreír, de recargar las pilas o simplemente de descansar, como en casa. Tengo la suerte de que crecí en un lugar lleno de parajes que me motivan.
En la foto te enseño uno de ellos, pero te cuento un secreto: todos tenemos rincones así muy cerca nuestra. Búscalos y disfruta.